sumajestad escoja! El título y montaje fotográfico de esta entrada fue inspirado en una de las famosas frases y situaciones atribuídas a Francisco de Quevedo; quien fue un noble en la corte española, pero sobre todo un famoso político, satírico y
Odaa la Navidad. entre el actual y el siguiente año. el festival que calienta el invierno helado. para irme al acabar el seis. por mucho que el treinta y uno las uvas nos den. comer polvorones camino de Belén. que fuera no hay quien lo quiera, ¡ea! la época del invierno más caliente.
Yun día se presentó ante la reina con un clavel en una de sus manos y una rosa en la otra, diciéndole: "Entre el clavel y la rosa, Su Majestad escoja". Francisco de Quevedo había hecho uso de un calambur (escoja / es coja) y ganó la apuesta, claro. FOTO: A falta de clavel y rosa, dalia y (?). ¿Alguien me puede decir qué flor es?
Derepente, llamaron a la puerta. 2. Cuento de horror - Juan José Arreola. La mujer que amé se ha convertido en fantasma. Yo soy el lugar de las apariciones. 3. La muerte en Samarra - Gabriel García Márquez. El criado llega aterrorizado a casa de su amo. - Señor -dice- he visto a la muerte en el mercado y me ha hecho una señal de
Quevedo se acercó a la reina con un clavel blanco en una mano y una rosa roja en la otra y le dio a elegir entre las dos flores: “Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad escoja”. De esta manera, ganó la apuesta y llamó a la finalmente las más de las veces, se impone la cordura y la sana crítica de la Sala. Porque, recordando a Quevedo, hay que saber decir algún calambur delante del tribunal: “Entre un clavel y una rosa, su majestad escoja”. Sin insultar, ni ofender. Vqbf.entre un clavel y una rosa su majestad escoja
